La imagen de oro y su adoración

Daniel 3

La Fe, las Llamas y un Decreto Universal de Muerte.-

Antes de iniciar nuestra clase, repasaremos lo que hemos estudiado en las dos clases anteriores. Del capítulo uno de Daniel, recordamos que el rey Nabucodonosor de Babilonia, conquistó a Jerusalén en el año605 a.C. Recordamos también que en ese año fueron llevados cautivos Daniel y sus tres amigos. Fueron traídos de un hogar sencillo de Judea y puestos en un programa de adiestramiento en la corte babilónica, por un periodo de tres años. Una cosa que no debe pasar por alto, toda persona que estudia este capítulo del libro de Daniel, es que el profeta propuso en su corazón, ser fiel a Dios. Daniel 1:8 dice: “Propuso no contaminarse”. Este capítulo muestra la importancia de ser leales a Dios. La lealtad es uno de los temas básicos. Pero el conflicto que existe en este capítulo, no ha sido resuelto. Porque, si el Dios de los hebreos era superior, ¿por qué permitió que la ciudad de Jerusalén fuera conquistada? ¿Por qué Daniel y sus tres amigos están cautivos en Babilonia? Por eso es que decimos que este capítulo muestra un desafío hacia el verdadero Dios.

Al llegar a Daniel 2, encontramos un tremendo triunfo de la verdad del Dios de Israel. En este capítulo se encuentra el sueño que Dios da a Nabucodonosor. ¿Recuerdan el sueño que estudiamos? ?Cuál era el contenido de este sueño? ¿Cuál era su significado? Era una imagen con cabeza de oro, pechos y brazos de plata, vientre de bronce, piernas de hierro y los pies de hierro y arcilla. Pero el rey olvidó el sueño y tuvo que llamar a los sabios, magos, astrólogos y adivinos. Les pidió que le dijeran el sueño y su interpretación. Por supuesto, esta petición estaba acompañada de una condena. Todos serían muertos, si no podían dar el sueño y su interpretación. Los sabios considerados el cerebro de Babilonia, le dijeron al rey: “Dinos el sueño y te diremos la interpretación”. Pero esto no fue posible, porque el rey no recordaba el sueño. ¿Podían los sabios saber lo que había acontecido en la mente de otra persona? ¿Podían ellos revelar el futuro? Esta es una de las cosas importantes de este capítulo. Daniel muestra por un lado, la futilidad de la sabiduría de Babilonia, y por el otro, la superioridad de la sabiduría de Dios, y la capacidad que Dios había dado a Daniel para poder interpretar sueños. Este maravillosos capítulo, muestra además, que el Dios de Israel, es el único que puede predecir el futuro. Es el único que puede saber los sucesos de la historia por adelantado. Finalmente, Daniel 2, termina con un tremendo triunfo de la verdad.

Usted recordará que el capítulo 2, muestra un bosquejo de la historia del mundo. Un bosquejo de las naciones que gobernarían desde los tiempos de Daniel: Babilonia, Medo-Persia, Gracia y Roma. En cierto lugar donde estudiábamos acerca del libro de Daniel, una esposa en forma emocionada, le dijo a su espso, “Es algo grandioso que no estamos viviendo en el tiempo de la cabeza de oro, o en el tiempo del pecho de plata, o en el tiempo de las piernas de hierro, ni en el tiempo del vientre de bronce, sino en el tiempo de los dedos de la imagen. Justamente antes de la venida de Cristo”. Es emocionante saber que estamos viviendo exactamente en el último segmento de la profecía de Daniel 2. Cuando la piedra azotará sobre los pies de la imagen y la destruirá, y el reino de Cristo, finalmente se establezca.

Veinticinco Años Después.-

Antes de iniciar el capítulo 3, recordemos algunos detalles del capítulo 2. ¿Cuándo conquistó Nabucodonosor a Jerusalén? En el año 605 a.C. ?Cuánto tiempo estuvo Daniel en el plan de adiestramiento? Tres años. Entonces, cuando Daniel interpretó el sueño de Nabucodonosor, era alrededor del año 602 a.C. Pero, los eventos del capítulo 3, ocurrieron unos 20 o 25 años después de la interpretación del sueño. Esto quiere decir, que estos sucesos ocurieron alrededor del año 580 a.C. ¿Cuál es la importancia de esta fecha? Esta es la fecha cuando el rey Nabucodonosor dio un decreto de gran significancia en el estudio del libro de Daniel. Ver Daniel 2:47-48:

“Y el rey habló a Daniel, y dijo: Ciertamente el Dios vuestro es Dios de dioses, y señor de los reyes, y el que revela los misterios, pues pudiste revelar este misterio. Entonces el rey engrandeció a Daniel, y le dio muchos honores y grandes dones, y le hizo gobernador de toda la provincia de Babilonia, y jefe supremo de todos los sabios de Babilonia“.

Este versículo muestra que fue al final de este capítulo cuando el rey reconoce la superioridad de la sabiduría del verdadero Dios. Solamente veinte años más tarde. Cuando llegamos a los sucesos del capítulo 3, encontramos que el rey empieza a olvidarse de la majestuosidad y de la hermosura de la interpretación del sueño. Me pregunto. ¿Ha hecho Dios algo maravilloso en tu vida? ¿Ha él conmovido tu vida en una forma dramática, que haya hecho mella en tu conciencia? Yo no sé si esto podría ser olvidado. Yo nunca podría olvidar la forma maravillosa y dramática en que Dios obró en la vida de Nabucodonosor. Pero el relato dice, que a medida que los años iban pasando, se iba borrando de su mente las maravillas que Dios había hecho en su vida. ¿Es posible que Dios haga algo maravilloso en nuestra vida, y que pueda irse olvidando, al pasar de los años? Esto le pasó a Nabucodonosor.

Otra Imagen.-

Daniel 3:1 presenta un marcado contraste en relación con los últimos versículos del capítulo 2.

“El rey Nabucodonosor hizo una estatua de oro cuya altura era de sesenta codos, y su anchura de seis codos; la levantó en el campo de Dura, en la provincia de Babilonia”.

¿Cuál era el tema de Daniel 2? Una imagen. Daniel 3, empieza con una imagen. ¿Cuál es la diferencia entre la imagen de Daniel 2, y la imagen de Daniel 3? ¿Qué metales eran representados en la imagen de Daniel 2? Diferentes metales. Cabeza de oro, pecho y brazos de plata, vientre de bronce, piernas de hierro y los pies de hierro y arcilla. ¿De qué está hecha la imagen de Daniel 3:1? Es toda de oro. En Daniel 2, Dios dijo a Nabucodonosor, tu reino es representado por la cabeza de oro de la imagen. Pero después de tu reino se levantará otro inferior al tuyo, que es representado por el pecho de la imagen, construído de plata. Y así sucesivamente. Pero el rey manda a construir la imagen, toda de oro. Esto es como si Nabucodonosor hubiese dicho: “Aunque Dios ha dicho que mi nación es representada por la cabeza de oro, yo voy a hacer una imagen que sea toda de oro, para prefigurar la perpetuidad de mi reino”.

En recientes descubrimientos arqueológicos, fue encontrada una tablilla de los tiempos del imperio babilónico que dice: “Babilonia, reino de reinos, execelencia de la tierra. Mi reino dure para siempre”. Daniel 3:1, muestra el buen deseo que el rey tenía para su reino. Quería que este reino durara para siempre. Al construir la imagen, rechazó lo que Dios le mostró acerca del futuro. ¿Cuáles eran las medidas de la imagen? Tenía 90 pies de altura por 9 pies de ancho (27 m x 2,7 m). La imagen estaba construída en un pedestal, exactamente como la estatua de la Libertad. Esta estatua, incluyendo el pedestal tiene unos 305 pies de altura. La estatua sola, tiene entre 120 a 130 pies de altura. Lo que nos interesa aquí, es tener alguna relación de ambas estatuas, para tener un concepto de la altura de la imagen. Imagínese ver un enorme monumento en una planicie como es la de Dura, donde se dice que todo alrededor de Babilonia es plano. No cabe duda que se podía ver a grandes distancias. La imagen ha sido construída, está instalada, y lista para la ceremonia de la dedicación. Ahora estamos ante el gran monumento que simboliza la perpetuidad del imperio. Ver Daniel 3:2:

“Y envió el rey Nabucodonosor a que se reuniesen los sátrapas, los magistrados y los capitanes, oidores, tesoreros, consejeros, jueces, y todos los gobernadores de las provincias, para que viniesen a la dedicación de la estatua que el rey Nabucodonosor había levantado”.

Todos están de pie delante de la imagen que el rey ha construído. El poderoso monarca ha invitado a todos los poderosos del imperio. Ahora se da la órden, que todos los dirigentes de Babilonia deberían inclinarse en adoración a la imagen. Daniel 3:4 dice:

“Y el pregonero anunciaba en alta voz: Mándase a vosotros, oh pueblos, naciones y lenguas”.

Notemos que hay una órden. Hay un decreto universal que manda que todos adoren a la imagen.

No Es Solo Una Historia.-

Antes de seguir adelante, quiero recordarles, que Daniel 3, fue escrito para un tiempo especial de la historia de la tierra. Por eso decimos que una cosa es leer Daniel como un libro que muestra historias que sucedieron hace 2.000 años, y que tiene relación con nuestros días. Pero, otra cosa es, entender a Daniel 3, a la luz de la crisis que se ve a medida que pasa la historia. Daniel no presenta solamente eventos que sucedieron, presenta también eventos por suceder. Es importante entender a Daniel, no solo como eventos del pasado, sino como un símbolo de eventos que habrían de suceder desde los días del autor del libro, hasta el tiempo del fin del mundo. Daniel 12:4 dice:

“Pero tú, Daniel, cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin”.

Entonces vemos que el libro de Daniel tiene una aplicación especial para el tiempo del fin. El profeta dice en Daniel 12:4:

“Muchos correrán de aquí para allá, y la ciencia (sobre el libro) se aumentará”.

En Daniel 12:9 el ángel respondió:

“Anda Daniel, pues estas palabras están cerradas y selladas hasta el tiempo del fin”.

Daniel 12:13 dice:

“Y tu irás hasta el fin, y reposarás, y te levantarás para recibir tu heredad al fin de los siglos”.

Si se estudia todo el libro de Daniel, se encontrarán siete historias y siete profecías. Las historias dicen la forma en que sucedieron los eventos, pero las profecías muestran las formas en que sucederán estos eventos, pero muestra también el clímax de todos los sucesos. No quiero que sea mal entendido lo que he dicho. Cristo, habalando de su segunda venida dijo: “El día y la hora, nadie la sabe”. Pero sí podemos decir con certeza, que las profecías dicen y explican el órden de los eventos hasta la venida de Cristo. Si alguien dice que Cristo viene el 19 de julio de 1998, no lo creáis. El propósito de las profecías, es revelar al pueblo de Dios los eventos, y la forma en que tomarán lugar estos eventos. El propósito de esto, es para que el pueblo de Dios se prepare. Además de lo antes dicho, debe decirse también, que la profecía transpira la forma en que han de desarrollarse esos eventos. Esto es importante. Porque esto es lo que nos hace saber que la venida de Cristo está cerca.

Debemos tener en cuenta, que cuando estudiamos a Daniel 3, no estamos estudiando eventos limitados a un pasado lejano, sino a eventos que si bien sucedieron en el pasado, tienen su aplicación en el presente, y aun en el futuro. Daniel 3, habla de una imagen en la llanura de Dura. Habla de representantes que vinieron para adorarala. Habla de adoración forzada. Habla de presionar la mente. Habla de una adoración decretada por el poder legislativo. Daniel 3:4 dice: “Mándase a vosotros, oh pueblos, naciones y lenguas”. Si ponemos cuidado a la orden, encontraremos que no hay ninguna alternativa. Daniel 3:5-7, da una descripción del panorama de la siguiente manera:

“Que al oir el son de la bocina, de la flauta, del tamboril, del arpa, del salterio, de la zampoña y de todo instrumento de música, os postréis y adoréis la estatua de oro que el rey Nabucodonosor ha levantado; y cualquiera que no se postre y adore, inmediatamente será echado dentro de un horno de fuego ardiendo. Por lo cual, al oir todos los pueblos el son de la bocina, de la flauta, del tamboril, del arpa, del salterio, de la zampoña y de todo instrumento de música, todos los pueblos, naciones y lenguas se postraron y adoraron la estatua de oro que el rey Nabucodonosor había levantado”.

Notemos algunas cosas sobresalientes de estas declaraciones. Primero, este fue un decreto universal. Segundo, el dirigente del poder mundial demanda adoración. Tercero, el asunto básico gira alrededor de la obediencia. Por lo tanto, reverenciar la imagen, significaba desobedecer los mandamientos de Dios. Cuarto, todo el reino, como iglesia o como estado fue convocado para ejecutar el decreto. Si proyectamos esos sucesos hacia el futuro, encontraremos una similitud muy marcada. Apoc. 13:15-17, dice que al fin del tiempo se dará un decreto que obligará al pueblo de Dios a adorar conforme al decreto. Y el que desobedezca esa orden será condenado a la muerte. A medida que continuemos nuestro estudio, vamos a encontrar las similitudes de ambos decretos.
Subraye en su mente los siguientes puntos. La cabeza de oro de la imagen de Daniel 2, representa al imperio babilónico. Cuando los gobernadores se postraron ante la imagen, ellos se estaban postrando ante el jefe supremo de ese imperio. En los días de la Babilonia antigua, el rey era como una extensión de los dioses. Entonces, Nabucodonosor tomando la posición de los dioses, ordena que le adoren. Por supuesto, la forma en que se estaba haciendo, era indirecta, pues los adoradores físicamente se estaban postrando ante la imagen. En los días de Babilonia, la iglesia y el estado se unieron para forzar la conciencia a adorar una imagen. ¿Tiene esto alguna aplicación para el futuro de nuestros tiempos? Sí, esto se aplica a la crisis que se aproxima, a la crisis que ha de venir en el tiempo del fin.

Tres que Rehusan.-

Al continuar el estudio de Daniel 3, se encontrará que todos se postraron, con la excepción de Sadrac, Mesac y Abed-Nego. Daniel 3:8-12 dice:

“Por esto en aquel tiempo algunos varones caldeos vinieron y acusaron maliciosamente a los judíos. Hablaron y dijeron al rey Nabucodonosor: Rey, para siempre vive. Tú, oh rey, has dado una ley que todo hombre, al oir el son de la bocina, de la flauta, del tamboril, del arpa, del salterio, de la zampoña y de todo instrumento de música, se postre y adore la estatua de oro; y el que no se postre y adore, sea echado dentro de un horno de fuego ardiendo. Hay unos varones judíos, los cuales pusiste sobre los negocios de la provincia de Babilonia: Sadrac, Mesac y Abed-Nego; estos varones, oh rey, no te han respetado; no adoran tus dioses, ni adoran la estatua de oro que has levantado”.

¿Por qué Sadrac, Mesac y Abed-Nego no se postraron ante la imagen? ¿Por qué no obedecieron el edicto dado por el estado? ¿Acaso no enseña la Biblia que tenemos que obedecer las leyes de la tierra? Veamos los que dice Romanos 13:1-2. En esta porción bíblica, dice que debemos estar sujetos a las autoridades. Entonces, ¿por qué no se postraron los tres varones judíos? ¿Estaban mostrando su rebeldía contra las leyes del gobierno? O, ¿eran una plebe exitadora? O, ¿eran de esa clase de jóvenes que deciden quemar las oficinas del servicio militar? Veamos el por qué de esta actitud.

Lo que se Relaciona con el Gobierno.-

¿Qué enseña la Biblia en cuanto a los deberes del cristiano hacia el gobierno civil? El consejo en Romanos 13:1 es: “Sométase toda persona a las autoridades superiores”. Al leer todo el capítulo de Romanos 13, encontraremos que aquí no se está refiriendo a la autoridad divina. Pues el cristiano debe obedecer a Dios. Pero aquí, Pablo, está hablando de los poderes terrenales. Ver Romanos 13:1-2:

“Porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas. De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos”.

Es decir, que no hay un poder en los gobiernos que sea superior al de Dios. Sin embargo, el cristiano tiene cierta responsabilidad con el gobierno establecido por Dios. Y estos versículos están hablando de esa responsabilidad. De hecho, Cristo dijo: “Dad a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios”. ¿Es correcto? Sí, es correcto. Cristo muestra que debe haber obediencia a los gobiernos establecidos por Dios. Entonces vemos que hay áreas en que el estado es la autoridad, y el cristiano está obligado bajo el deber moral a respetar esa autoridad. Un ejemplo: el estado tiene una ley que establece el límite de kilómetros que se pueden correr por hora. El cristiano tiene la responsabilidad de obedecer esa ley. Sin embargo, cuando el estado establece una ley que está en conflicto con las leyes de Dios, el cristiano tiene una razón más poderosa, para obedecer a Dios. En esto se basaba la discusión del apóstol Pedro. Las autoridades judías exigían una obediencia que estaba en oposición a la ley de Dios. El apóstol quiere mostrarles que el estado no tiene ninguna autoridad para forzar a los ciudadanos a violar su conciencia. Y mucho menos a desobedecer la ley de Dios. El estado no tiene poder para crear leyes de adoración, que obliguen al fiel adorador de Dios, a desobedecer sus leyes divinas. Por eso, el apóstol responde en Hechos 5:29:

“Es menester obedecer a Dios antes que a los hombres”.

En los primeros días del siglo, cuando los romanos establecieron leyes que decían que era falta de lealtad al gobierno, ponerse a predicar el evangelio de Cristo. Pedro les dice: “No podemos obedecer sus leyes porque están en contra de nuestra conciencia. Nuestra conciencia no nos lo permite”.
En la llanura de Dura, Nabucodonosor levantó una imagen y ordenó que se la adorase. Pero para los fieles de Dios, postrarse ante la imagen, significaba violación de los mandamientos de Dios. Exodo 20 tiene la ley de Dios, y en los versículos 3-6, dice, que no debe adorarse a otros dioses, ni inclinarse ante ellos. El relato bíblico, claramente muestra que el asunto en cuestión eran los dos primeros mandamientos.

“No tendrás dioses ajenos delante de mi. No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen, y hago misericordia a millares, a los que me aman y guardan mis mandamientos”.
Para Sadrac, Mesac y Abed-Nego, obedecer el decreto dado por el estado, estaba en completa violación del primero y del segundo mandamientos. Esto quería decir, ser fiel a Dios, significaba ser infiel al rey. Por lo tanto, ellos fueron considerados como desleales y desobedientes a la ley del estado. Ahora, acusados por los demás sabios de desleales, tienen que comparecer ante el rey.

Encontrar la Verdad.-

Cuando leí las palabras que el rey dijo a Sadrac, Mesac y Abed-Nego, me pregunté, ¿qué clase de sabiduría mostró el rey? Sin temor a equivocarse, se puede decir, que él mostró una sabiduría superior. Trató de mostrar la superioridad que había en él. Si analizamos la actitud, de ese momento, nos daríamos cuenta, que nosotros podríamos resolver muchos problemas que tienen alguna similitud a la que el rey trató de resolver. Daniel 3:14 dice:

“Habó Nabucodonosor y les dijo: ¿Es verdad, Sadrac, Mesac y Abed-Nego, que vosotros no honráis a mi dios, ni adoráis la estatua de oro que he levantado?”

Nabucodonosor no vio a los tres varones judíos cuando ellos quedaron en pie, cuando todos sabían que la orden era de postrarse. Alguien se lo dijo. Los caldeos quienes eran el cerebro y la confianza de Babilonia, quienes habían estado buscando algo para poder condenarlos, le dijeron al rey. Estos tres varones judíos no se postraron ante la imagen cuando tú diste la orden. El rey les llama y les dice: ¿Es cierto que ustedes no se postraron?

¿Has escuchado decir, que alguien escuchó que otras personas habían escuchado, que alguien había dicho algo acerca de ti, y por causa de lo que has escuchado, te has enojado con esa persona? Nabucodonosor mostró una prudente sabiduría al tratar con estos jóvenes. El los llama y les pregunta: ¿es cierto lo que he escuchado? Pareciera que el Señor quiere darnos un consejo a través de esta actitud del rey. Si yo escucho que alguien ha dicho algo de mi, o que alguna persona está enojada conmigo. ¿Sería la mejor forma, enojarme yo también por lo que alguien ha dicho? O sería mejor ir hacia la persona y en una forma amable y sencilla, decirle; yo sé que hay algo que me concierne. Puede ser que sea rumor, pero yo he escuchado esto, y estoy preocupado por saber la verdad. Y si es verdad, ¿qué puedo hacer para corregir la situación? ¿No es este el consejo que Jesús dio en Mateo 18:15?

“Por lo tanto, si tu hermano peca contra ti, ve y repréndele estano tú y el solos; si te oyere, has ganado a tu hermano”.

En vez de acusar a un individuo, ¿cuántas amistades podríamos salvar si siguiéramos este consejo bíblico. Daniel 3:15 da a entender que el rey estaba empezando a ceder a la influencia del Espíritu Santo. Cuando leamos el capítulo 4, vamos a encontrar, que por la influencia de Daniel y de sus tres amigos, Nabucodonosor finalmente llegó a convertirse. Hay lecciones maravillosas en los capítulos 2, 3 y 4. Pronto estudiaremos la forma maravillosa de la conversión de ese rey pagano.

Una Segunda Oportunidad.-

Antes de iniciar de lleno el capítulo 4, leamos Daniel 3:15:

“Ahora, pues, ¿estáis dispuestos para que al oir el son de la bocina, de la flauta, del tamboril, del arpa, del salterio, de la zampoña y de todo instrumento de música, os postréis y adoréis la estatua que he hecho? Porque si no la adorareis, en la misma hora seréis echados en medio de un horno de fuego ardiendo; ¿y qué dios será aquel que os libre de mis manos?

Nabucodonosor dice, “Miren, es cierto que cuando la banda tocó la primera vez, ustedes no se postraron. Piensen por un momento, lo embarazoso que ha sido para mi, saber que cuando estábamos en el momento más solemne del servicio dedicatorio de esta imagen, saber que todo iba bien, excepto, ustedes que no se postraron. Esto es embarazoso para mi. Yo no quiero que esto suceda otra vez. Así que, cuando la banda toque otra vez, postraos”. Ahora la orden se había cambiado a una petición. Notemos la maravillosa respuesta de estos tres jóvenes hebreos en Daniel 3:16:

“Sadrac, Mesac y Abed-Nego respondieron al rey Nabucodonosor, diciendo: “No es necesario que te respondamos sobre este asunto””.

Una cosa que debe notarse. Antes que los jóvenes hebreos se dirigieran a la llanura, ya habían hecho su decisión. Sus mentes ya estaban preparadas para el evento. Esto es una cosa muy importante en la vida de todo ser humano. Prepararse antes que lleguen los sucesos. Nosotros también tenemos que hacer preparativos para los eventos que han de venir en el futuro. Por lo tanto, es necesario empezar a hacer los preparativos para esos eventos.

Cuando estos jóvenes llegaron a la llanura, no estaban pensando, qué vamos a hacer. Ellos no tuvieron que pensar si no nos postramos, qué va a pasar. Ellos ya habían hecho sus preparativos y su decisión. Habían hecho un voto y lo habían sellado, no importando lo que viniese, ellos serían fieles a Dios.

Hay decisiones en nuestras vidas que deben ser hechas en ciertos momentos oportunos. No se puede esperar. Porque si se espera hasta que llegue la ocasión, cuando esta decisión debe ser puesta en práctica, es posible que sea demasiado tarde. Como resultado de no haber hecho la decisión a tiempo, podemos ser presionados por la multitud y seremos forzados a sacrificar nuestros principios de lealtad a Dios. Los tres jóvenes hebreos sabían que era necesario hacer esta preparación. Por eso, antes de salir para la llanura, fueron a su lugar secreto de oración, allí en un lugar tranquilo, se postraron ante Dios. Pidieron ayuda para permanecer fieles a cualquier costo de sus vidas. Encomendaron sus vidas enteramente al Señor. Por eso, pudieron decir a Nabucodonosor, “No es necesario que te respondamos sobre este particular”. ¡Qué fe! ¡Qué confianza! Pero esta fe y esta confianza, no eran el producto del azar. Esto era el resultado de una relación continua con Dios. Ellos estaban allí con la confianza que Dios les salvaría del horno de fuego. Ver Daniel 3:17-18:

“He aquí nuestro Dios a quien servimos puede librarnos del horno de fuego ardiendo; y de tu mano, oh rey, nos librará. Y si no, sepas, oh rey, que no serviremos a tus dioses, ni tampoco adoraremos la estatua que has levantado”.

Por lo leído, concluimos que ellos dijeron: “Si es la voluntad de Dios, él nos salvará, y si no, pues preferimos ir al horno de fuego, y ser quemados, y perder nuestras vidas, antes que ser exaltados en el palacio del rey, sabiendo que hemos sido desleales a Dios”.

Hay cristianos que dicen: “Si usted es fiel a Dios, nunca tendrá problemas en la vida”. Estos dan a entender, que si se acepta a Jesús como salvador, todo será como flotar en un mar de vidrio, dentro de un barco, iluminado por la luna. Donde nunca hay brisas ni olas. Dando a entender con esto, que aceptar a Jesús, significa vivir con salud y prosperidad. ¿Es esto una realidad? El apóstol Pablo dijo a los corintios: “Apedreado muchas veces, en naufragios, azotado con varas, en prisiones...” Entonces, aceptar a Jesús, no significa vivir en el éxtasis de las aguas tranquilas.

Yo no se si esto era un éxtasis para los jóvenes hebreos, estar frente al horno ardiendo. Estoy seguro que estaban calientes, pero no era por haberse dado un baño de sol. Ellos tenían que enfrentar el problema real. La vida cristiana no nos libra de los problemas, pero sí, nos prepara para hacer frente a los problemas.

Ya que estamos hablando de cristianos, sería bueno decir, que la diferencia entre el cristiano y el no cristiano, no es, que el no cristiano se enferma y el cristiano, no. O que el no cristiano tiene problemas financieros y el cristiano, no. Que el no cristiano tiene problemas con su familia y el cristiano, no. Esta no es la enseñanza bíblica. La enseñanza bíblica es, que el cristiano, mediante el poder de Cristo recibe poder para hacer frente a todas esas pruebas y dificultades. El no nos libra de las dificultades, pero está con nosotros, como estuvo con los hebreos en el horno de fuego. Lo único que tenemos que hacer, es lo que hicieron los tres jóvenes, ellos tuvieron fe.
¿Qué es fe? ¿Cómo define la Biblia en Hebreos 11:1?

“Es pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que se no ve”.

El relato de los sucesos de estos tres jóvenes, sigue diciendo:

“Entonces el rey Nabucodonosor se llenó de ira, y se demudó el aspecto de su rostro contra Sadrac, Mesac y Abed-Nego, y ordenó que el horno se calentase siete veces más de lo acostumbrado. Y mandó a hombres muy vigorosos que tenía en su ejército, que atasen a Sadrac, Mesac y Abed-Nego, para echarlos en el horno de fuego ardiendo”.

No pierda el hilo central del tema. Hay una imagen levantada en la llanura de Dura, en Babilonia. La iglesia y el estado se unen. La adoración es requerida bajo decreto universal de muerte. El horno se calienta siete veces más de lo acostumbrado. Los fieles seguidores de Dios, son puestos a prueba en una crisis severa, cuando los mandamientos de Dios, son puestos a un lado por un gobierno antagónico de Babilonia. Pero eso no es todo. Hay una prueba más grande que está por delante. Es entonces, cuando los seguidores de Jesús, de los últimos días, tendrán que pasar por pruebas muy semejantes a las que pasaron los tres hebreos.
La Crisis Final.-

Alguien puede preguntar, ¿se repetirán las escenas de Daniel 3, en forma mundial? Frecuentemente, cuando estamos dando estos estudios, se levanta esta pregunta: ¿Qué acerca del dictador que menciona Apocalipsis? Algunas veces sepuede gastar toda la noche dando respuestas a ciertas preguntas. Pero aun así, podrán no ser entendidas del todo. La razón es, que hay muchos malos entendidos acerca del libro de Daniel y Apocalipsis. Estos dos libros deben ser estudiados juntos, bajo un entendimiento profético. Por ejemplo, veamos lo que dice Apocalipsis 13:15-17:

“Y se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen hablase e hiciese matar a todo el que no la adorase. Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente; y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuvise la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre”.

¿Qué fue levantado en la llanura de Dura? Una imagen. ¿Qué pasó en el momento cuando se dedicaba la imagen? Tres jóvenes fueron forzados a adorar la imagen, bajo sentencia de muerte, pero no la adoraron. La orden era, que cualquiera que no adorase la bestia, fuese sentenciado a muerte. Este principio se aplica a los últimos días de la historia de este mundo. Apocalipsis dice que en el futuro, la iglesia y el estado se unirán otra vez. Dice que la adoración será dictada por un poder legislativo bajo pena de muerte. El libro de Apocalipsis claramente revela el plan de Dios, y desenmascara la estrategia de Satanás.

Cuatro en el Fuego.-

Volvamos a Daniel 3:23-25:

“Y estos tres varones, Sadrac, Mesac y Abed-Nego, cayeron atados dentro del horno de fuego ardiendo. Entonces el rey Nabucodonosor se espantó, y se levantó apresuradamente y dijo a los de su consejo: ¿No echaron a tres varones dentro del fuego? Ellos respondieron al rey: Es verdad, oh rey. Y él dijo: He aquí yo veo cuatro varones sueltos, que se pasean en medio del fuego sin sufrir ningún daño; y el aspecto del cuarto es semejante al hijo de los dioses”.

Aquí dice que, Sadrac, Mesac y Abed-Nego son echados en el horno de fuego. ¿No es esto, buenas nuevas que estos tres jóvenes hayan sido echados en el horno de fuego? Sí. Porque el Señor no les permitió estar solos en el horno. El vino no solo para librarlos, sino para hacerles compañía. Y algo más. Esto lo veremos posteriormente. En la misma forma en que estas pruebas fueron preparadas para los tres jóvenes hebreos, hay también una prueba para nosotros en el futuro. Pero los fieles no deben temer, porque Cristo estraá con ellos, no sólo para fortalecerlos, sino también para libertarlos. El fuego no podrá quemar a las personas, solo quemará las ataduras. Serán echados al fuego, pero saldrán sin ser tocados por él. Ver Daniel 3:26:

“Entonces Nabucodonosor se acercó a la puerta del horno de fuego ardiendo, y dijo: Sadrac, Mesac y Abed-Nego, siervos del Dios Altísimo, salid y venid. Entonces Sadrac, Mesac y Abed-Nego salieron de en medio del fuego”.

Cuando los tres jóvenes fueron lanzados al fuego, habían sido acusados de rebeldes a las leyes del gobierno. Pero ahora el rey dice: “Siervos del Dios Altísimo”. Se ha cambiado totalmente el concepto. De taridores han pasado a ser fieles testigos del Dios Altísimo.

El Dios que Libra.-

En Daniel 2, Nabucodonosor fue forzado a reconocer al verdadero Dios, como el único que conoce el futuro y que puede revelar los misterios de las profecías. En Daniel 3, es forzado a reconocerle como el Dios que puede libertar. Ahora le vemos como el Dios que puede redimir y salvar. Es posible que en esta noche, haya alguien aquí que tenga serios problemas, pero, si hay alguien que tiene un conflicto, Daniel 3, le presenta a un Dios que puede libertarle de ese conflicto. Es posible que haya una persona, que por muchos años ha estado luchando con el problema del alcohol, o posiblemente con el problema del tabaco, o con su temperamento, quiere ser más paciente y no puede. Daniel 3, presenta a un Dios que puede libertarlos del problema del alcohol o del cigarro, o cambiar su mal temperamento. ¿No son estas, buenas nuevas? Sí, el Dios a quien servimos, es poderoso para podernos librar de cualquier problema, conflicto o dificultad.

Hemos visto que al finalizar el capítulo 3, se presenta otra vez, el triunfo del verdadero Dios. Nabucodonosor reconoce a Dios, como el único que puede libertar y salvar. Pero notemos algo más en Daniel 3:29:

“Por lo tanto, decreto que todo pueblo, nación o lengua que dijere blasfemia contra el Dios de Sadrac, Mesac y Abed-Nego, sea descuartizado, y su casa convertida en muladar; por cuanto no hay Dios que pueda librar como este”.

¿Cree usted que fue una buena cosa lo que Nabucodonosor hizo? Déjeme hacer esta pregunta de otra forma. Supongamos que el gobierno de los Estados Unidos, pasase un decreto que obligase que todos se hagan cristianos. ¿Creen que sería una buena cosa? Supongamos que quiere resolver el problema del crimen de las calles y dice: “Todos tienen que aceptar adorar sólo a Jesús”. Esta es una adoración decretada por el gobierno, si usted no la obedece, entonces será puesto en la silla eléctrica. ¿Cuántos creen que sería una buena cosa? Pues, Nabucodonosor lo hizo. ¿No es verdad? Si Dios hubiera querido una adoración forzada, ¿no podía haber hecho que los ángeles le adorasen desde el mismo principio, sin haberles dado la facultad del libre albedrío? Si él hubiese querido esto, no hubiese dado chance a Lúcifer para que se rebelase. Desde un mismo principio hubiese puesto una adoración forzada. Pero esto no fue así. La Escritura dice, que Dios nos da el poder de la elección. ¿Qué significa esto para usted? ¿Ha podido usted escoger a su padre? ¿Ha podido escoger el color de su piel o de sus ojos, o el peso o la altura? No, eso no es lo que quiere decir. Lo que quiere decir es que usted es un ser libre moralmente. Con capacidad de elegir libremente lo que mejor le ayude a desarrollar una mejor personalidad y un mejor carácter. El verdadero Dios desea una adoración voluntaria. Por eso decimos que Daniel 3, termina una vez más, con un triunfo del verdadero Dios. Nabucodonosor ha sido impresionado por un Dios que quiere que le adoren libremente. El ha aceptado al verdadero Dios. Aunque en lo profundo de su ser, hay algo más que debe ser cambiado.

Cuando estudio la historia de la vida de Nabucodonosor, encuentro más ánimo. Porque, si a Dios le tomó 30 años para cambiar la actitud de este monarca pagano, y no lo abandonó, ¿cree usted que Dios lo va a abandonar porque ha fracasado muchas veces en el pecado? Piense en la historia de Nabucodonosor .

La próxima semana vamos a estudiar una de las conversiones más emocionantes en toda la Biblia. La historia de como Dios trabajó en la mente de Nabucodonosor por 35 años, y finalmente lo ganó. Usted no querrá perderse ese estudio. Oremos.