La derrota se torna en VICTORIA

Ustedes no están solos en su búsqueda por comprender mejor la Biblia. De hecho, ustedes estarán interezados en saber qué hombres de estado, así como filósofos, han comenzado este mismo estudio. A través de los siglos el libro de Daniel ha intrigado a educadores, dirigentes religiosos y científicos sociales, y hoy en día multitudes lo estudian. Cristobal Colón, el descubridor de América, fue un estudiante ardiente de las profecías y en particular del libro de Daniel. Isaac Newton, el famoso matemático estudió detalladamente las profecías de Daniel. Ana Bradstred, la primera poetisa americana, estudió las profecías de Daniel. Timoteo Dwight, el primer presidente de la Universidad de Yale, fue un ardiente estudiante de las profecías y estudió las profecías de Daniel. Si, las profecías han intrigado a hombres y mujeres a través del tiempo, y aún los intriga hoy en día.

¿Donde comenzaremos?

¿Cuántos de ustedes alguna vez han leído un libro comenzando por el último capítulo? ¡Yo sé que algunos lo han hecho! En cierta ocasión, un hombre dijo, “Antes de leer un libro, primero leo el último capítulo. De esta manera al leer el último capítulo me doy cuenta si deseo leer el resto del libro o no. Si la conclusión no me intereza, yo sé que los sucesos que llevaron a tal conclusión tampoco me interezan, y por lo tanto no lo leeré”. Esta noche, al comenzar nuestro estudio del libro de Daniel ustedes pensarán que vamos a comenzar con el capítulo 1. Pero vamos a comenzar con el último capítulo, el capítulo 12. A menos que ustedes comprendan la conclusión del libro de Daniel será imposible que comprendan los sucesos que llevaron a tal conclusión. Así que tomen su Biblia y busquemos el capítulo 12 de Daniel.

El libro de Daniel fue escrito para el fin.-

Probablemente haya alguien que se esté preguntando dónde es´ta el libro de Daniel. Como antes les dije, si esta es la primera vez que usted está estudiando la Biblia o si usted la ha estudiado por muchos años, cualquiera que sea su caso, a todos les damos una cordial bienvenida a nuestra clase. El libro de Daniel se encuentra justamente antes del libro de Oseas y después del libro de Ezequiel. Esta noche estamos comenzando nuestra clase con el último capítulo, porque a menos que usted comprenda el tema del último capítulo será imposible que comprenda el tema de Daniel. ¿Cuál es el tema básico del libro de Daniel? ¿Por qué fue escrito el libro de Daniel? ¿Por qué dedicar tiempo esta noche al estudio de un libro antiguo? ¿Para qué dedicar tiempo al estudio de un libro que fue escrito hace 2.500 años? La mayoría de las personas quieren algo que esté al día, algo que se aplique a sus vidas hoy. ¿Por qué estudiar un libro que fue escrito alrededor del año 600 a.C.? Bueno, vayamos al libro de Daniel, al capítulo 12 y al versículo 4:

“Tu empero Daniel, cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin: pasarán muchos, y se multiplicará la ciencia”.

Yo voy a leer cuatro pasajes del capítulo doce, y quiero ver si ustedes comienzan a darse cuenta de cuáles son las palabras claves en estos pasajes. Aquí dice,

“Tu empero Daniel, cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin”.

Ahora veamos Daniel capítulo 12, versículo 6:

“Y dijo uno al varón vestido de lino, que estaba sobre las aguas del río: ¿cuándo será el fin de estas maravillas?”

Y Daniel 12, versículo 8:

“Y yo oí, mas no entendí. Y dije: Señor mío, ¿cuál será el fin de estas cosas?”
¿Notan ustedes la similitud en los textos leídos? Ahora veamos Daniel 12:9:

“Y dijo: Anda, Daniel, pues estas palabras están cerradas y selladas hasta el tiempo del fin”.

Las palabras están selladas ¿hasta que tiempo? El tiempo del fin. De manera que el último verso del último capítulo del libro de Daniel nos provee con la grandiosa y gloriosa conclusión de Daniel. Estamos comenzando con el final porque a menos que comprendamos el final no comprenderemos su comienzo. Daniel 12:13 dice:

“Y tu irás al fin, y reposarás, y te levantarás a recibir tu heredad al fin de los días”.

Después de leer estos cinco pasajes del capítulo 12 de Daniel, ¿qué similitud hallan ustedes entre ellos? ¿Todos tratan de qué? Del fin. ¿Entonces, a qué conclusión ustedes llegan al estudiar las profecías de Daniel? Ellas han sido escritas específica y directamente para el tiempo del fin.
¿Notaron ustedes en Daniel 12:4 lo que el ángel le dijo a Daniel? El ángel le dijo:

“Tu empero Daniel, cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin: pasarán muchos, y se multiplicará la ciencia”.

El ángel le dijo a Daniel: “Sella el libro y ciérralo”. El libro de Daniel está sellado. El libro de Daniel está cerrado hasta el tiempo del fin. Esto significa que en el tiempo del fin las profecías del libro de Daniel que tendrían una aplicación marcada y un significado específico serían entonces reveladas o abiertas.
Así que entonces, ¿por qué nosotros estudiamos hoy un libro que fue escrito 600 años antes de Cristo? Es porque este libro, de entre todos los libros de la Biblia, tiene una aplicación especial. Tiene un significado peculiar para nuestro tiempo. Este libro se escribió para este tiempo de la historia del mundo conocido como “El Fin”. Hombres y mujeres de todas partes reconocen que este mundo está al borde de una tremenda crisis. Las ciudades de América están llenas de crimen y violencia. Alrededor del globo las naciones están envueltas en disturbios políticos. Las naciones africanas están llenas de conflictos. El Medio Oriente es un punto caliente, hirviendo, casi listo para explotar. Terremotos, desastres naturales, hambres, y una hueste de otros problemas que nos plagan.
Si, verdaderamente, éste es el tiempo de la historia del mundo conocido en la Biblia como el tiempo del fin. De manera que esta noche, el libro de Daniel tiene un significado especial para nosotros. Tiene una aplicación especial para nosotros los que estamos viviendo en el tiempo del fin. Si, ahora como nunca es necesario entender este libro de la Biblia. El libro de Daniel en el Antiguo Testamento, y el libro de Apocalipsis en el Nuevo Testamento, son los dos libros que tienen que ser entendidos por los que vivimos en los últimos días de la historia del mundo.

Historias y Profecías.-

El libro bíblico de Daniel puede dividirse en dos partes. En la primera parte encontramos las historias de Daniel. En la segunda parte las profecías de Daniel. Las profecías nos dicen cuándo; las historias nos dicen cómo. Las profecías nos dicen cuando el fin vendrá - no precisamente el día ni la hora - pero nos sirven de postes guía. Supongamos que yo voy conduciendo de aquí a Nueva York. Como parte del camino paso por Hartford, y allí veo que dice: “110 Km para Nueva York”. Entonces sigo un poco más adelante y paso por Meriden y allí dice: “90 Km para Nueva York”. Y sigo adelante y llego a New Haven, y allí dice ahora, “70 Km para Nueva York”. Entonces sigo más hacia el sur y paso por Bridgeport y allí dice, “40 Km para Nueva York”. Cada uno de esos letreros me dejarían saber que yo me estoy acercando. Las profecías de Daniel son así. Las profecías de daniel son como postes guías que nos anuncian el cercano fin. Ellas no nos dicen el día o la hora, pero nos indican la proximidad del fin.
Ahora, las historias tienen un propósito diferente. Las historias no nos dicen cuan cercano está el fin, sino cómo prepararnos para el fin cuando éste venga. ¿Cuál es el significado, por ejemplo, de Daniel en el foso de los leones? Será esta nada más que una historia bonita para contársela a nuestros niños y decirles, “Oh, eso fue maravilloso, Daniel fue librado del foso de los leones”. ¿Por que no? ¿No es esa una historia maravillosa? No, la historia de Daniel en el foso de los leones nos dice algo del tiempo del fin. Es una historia que se aplica al tiempo del fin. Cada historia que encontramos en el libro de Daniel es para ayudarnos - a usted y a mi - a que nos preparemos para el tiempo del fin.
Esta noche voy a invitarles a que regresemos del último capítulo, el cual nos habla del por qué fue escrito el libro de Daniel, al primer capítulo. Vamos a estudiar el libro de Daniel capítulo por capítulo. Y cada clase será más y más emocionante.
Un breve fondo acerca de las Profecías de Daniel.-

Un breve fondo sobre las profecías de Daniel nos va a ser de gran ayuda. El libro de daniel lo escribió Daniel, como es sabido. La mayor parte fue escrita cuando estaba cautivo por los babilónios, y más tarde, por los medos y persas. El capítulo 1 de Daniel introduce el fondo histórico y geográfico de todo el libro. Comencemos con el primer versículo. Esta es una clase bíblica, de manera que estudiaremos el capítulo, versículo por versículo:

“En el año tercero del reinado de Joacim rey de Judá, vino Nabucodonosor rey de babilonia a Jerusalén y la cercó”.

El tema del libro de Daniel se establece en este versículo primero. Aquí hay una batalla entre Jerusalén y su rey y Babilonia y su rey. Justamente en el capítulo uno de Daniel se introduce un conflicto. En el capítulo 1 de Daniel, se introduce una guerra, una batalla, una lucha. Todo el tema del libro de Daniel es esta lucha titánica entre las fuerzas del infierno y las fuerzas del cielo; entre las fuerzas del mal y las fuerzas del bien; entre los poderes del infierno y los poderes del cielo.
Joacim es el rey de Judá. Judá era una ramificación de Israel, en realidad. La nación judía estaba dividida en dos secciones: diez tribus en el norte del reinado, dos tribus en el sur del reinado. Judá era parte del reino del sur y Joacim reinó por once años. Joacim comenzó su reinado a la edad de 25 años y reinó hasta la edad de 36 años. Pero Joacim era rebelde contra el verdadero Dios. El guió a Judá a la rebelión o apostasía contra el verdadero Dios. Sin embargo, cuando Judá fue fiel, Dios puso una pared de protección alrededor de ella y las naciones paganas era impotentes para vencer a Israel. Dios la protegió cuando ella fue fiel y obediente. Pero cuando Judá se volvió desobediente y rebelde contra Dios, la muralla de protección cayó y Dios no la pudo proteger más. De manera que Joacim el rey de Judá se rebeló contra Dios, la muralla de protección cayó y Babilonia bajo la dirección de Nabucodonosor atacó a Jerusalén.

Una comparación entre Babilonia y Jerusalén.-

Babilonia era el centro de idolatría y de adoración a dioses falsos. El centro de su existencia era la rebelión contra los principios del Dios verdadero. Era la ciudadela de la apostasía y el error, centro de lascivia, inmoralidad y placer sensual. Jerusalén, por otra parte, se levantaba en oposición a los principios de Babilonia. Profundo en sus adentros estaba la adoración al verdadero Dios. Jerusalén era la que custodiaba las verdades de Dios. A través de Jerusalén Dios deseaba comunicar su voluntad al mundo. Mientras sus ciudadanos se mantuvieran fieles a los principios de Jehová, era el designio de El que ellos mostraran dominio propio, temperancia y pureza.
Sin embargo Jerusalén se apartó de su alto y noble propósito. Falló al no comprender el propósito de Dios; y sus dirigentes se apartaron de le elevado ideal que Dios había establecido. Así Jerusalén, el centro de la adoración al verdadero Dios, fue derribada por Babilonia.
Dios permitió que Israel fuera derribada porque el rey de Israel se rebeló contra Dios, su pueblo se tornó más y más infiel al seguir las abominaciones de las naciones paganas, y al rechazar las advertencias de los mensajeros de Dios. En efecto Judá le dio las espaldas a las claras instrucciones de Dios y no escuchó sus advertencias persistentes.
La cautividad de Judá cumplió dos propósitos: en la adversidad Judá se entregó al arrepentimiento y a la confesión del pecado y a la dependencia de Dios. Dios usó la adversidad para lograr lo que no logró en la prosperidad. El conocimiento del verdadero Dios se esparció en Babilonia a través de la cautividad de Judá.
Babilonia estaba a unos 1.600 Km al noroeste de Jerusalén. Nabucodonosor iba a atacar algunas ciudades egipcias fronterizas, porque estas ciudades estaban en rebelión contra el gobierno babilónico. Pero Jerusalén estaba entre Babilonia y estas ciudades egipcias fronterizas. Cuando Joacim se rebeló contra el gobierno de Nabucodonosor y violó un tratado que había hecho con el rey de Babilonia, Nabucodonosor y los ejércitos de Babilonia atacaron a Jerusalén. Ahora, para una ciudad, un sitio era cosa muy, muy terrible. Cuando ocurría un sitio, la ciudad era rodeada, todos los suministros de alimentos eran cortados. Ningún alimento entraba y nadie podía salir en busca de alimento. Después de detener los suministros y los habitantes de la ciudad quedaban debilitados por la carestía y el hambre, los soldados atacaban con arietes de guerra y catapultas. Estas catapultas tiraban grandes rocas por el aire y rompían las murallas de la ciudad. Mientras las murallas eran destruídas, los arietes de guerra golpeaban y rompían las grandes puertas de la ciudad. Entonces los atacantes ponían sus escaleras contra las murallas, las subían y atacaban, y la sangre corría por las calles.
Cuando una ciudad era sitiada por semanas y meses, los habitantes temblaban de temor porque ellos sabían que pronto la sangre correría por las calles. Y así Babilonia sitió a Jerusalén, la sangre corrió por las calles, y la crema de la juventud de Jerusalén fue tomada cautiva. Pero justamente cuando los ejércitos babilónicos estaban saqueando Jerusalén, Nabucodonosor recibió el mensaje de que su padre, nabopolsasar, había muerto. Nabucodonosor estaba a 1.600 Km de Babilonia y él sabía que alguien le podía arrebatar su posición de rey que por derecho le pertenecía. Así que Nabucodonosor regresó rápidamente a Babilonia para tomar poseción del trono. Algunos de los jóvenes claves de Jerusalén fueron tomados y llevados a babilonia. Leemos la historia en Daniel 1, versículo 2:

“Y el Señor entregó en sus manos a Joacim rey de Judá, y parte de los vasos de la casa de Dios, y los trajo a tierra de Sinar, a la casa de su dios, y metió los vasos en la casa del tesoro de su dios”.

Ese término “tierra de Sinar” es otra forma de describir a babilonia. Nabucodonosor fue al mismo templo, al templo de Jerusalén que fue edificado y dedicado a la adoración a Dios, y tomó los vasos que habían sido consagrados al servicio divino y los trajo a su templo. Este fue un acto supremo de profanación. Noten que dice, “y los trajo a la tierra de Sinar, a la casa de su dios”. Babilonia tenía como 13 dioses, pero el dios especial de Nabucodonosor era Bel Marduk. Bel Marduk era el dios de la devoción de nabucodonosor. Y Nabucodonosor tomó los vasos de la casa de Dios y los trajo a la casa de su dios, Bel Marduk.
A esta altura los ejércitos Babilónicos habían regresado y había una gran fiesta en el trono de babilonia, una fiesta de triunfo. “¡Vencimos a Jerusalén! Trajimos cautivos los jóvenes claves de Jerusalén. Tomamos los vasos de la casa de su dios y los trajimos a la casa de nuestro dios. ¡Victoria para los ídolos de babilonia! ¡Triunfo para el pueblo de Babilonia!” Mantengan esto en su mente. En breve lo aplicaremos al tiempo del fin.

La Aparente Derrota de Dios.-

Los primeros siete versículos del libro de Daniel, capítulo 1, son una verdadera derrota para el pueblo de Dios. Imagínense como se sintió Daniel cuando le dijeron en su cara: “¿Si tu Dios es el verdadero dios, por qué Jerusalén está en ruinas? ¿Por qué corrió la sangre por las calles? ¿Si tu Dios es el verdadero dios, por qué tomaron los vasos del templo de Jerusalén y los trajeron aquí al templo de babilonia? Los ídolos, los dioses de madera y piedra, nos han dado la victoria a nosotros. ¿Si tu Dios es el verdadero dios, por qué tu estás cautivo aquí? ¿Por qué estás tu en esclavitud?” Preguntas difíciles de contestar a menos que uno comprenda.
Algunas veces, los cristianos de hoy, tienen que enfrentar preguntas muy similares: “Si tu Dios es el dios verdadero, ¿por qué tu acabas de perder tu trabajo? ¿Por qué estás sin trabajo? Si tu Dios es el dios verdadero, ¿por qué no hace algo por ti? ¿Por qué se te rompió el matrimonio? Si tu Dios es el dios verdadero, ¿por qué te azota la maldad, el dolor y la enfermedad? ¿No puede tu Dios hacer algo? ¿Tán debil es El, tán falto de poder? Si tu Dios es el dios verdadero, ¿por qué tu hijo nació con esa deformidad? ¿Por qué ese amigo tuyo se murió en ese accidente automobilístico? Si tu Dios es el dios verdadero, ¿por qué, por qué, por qué?” Todavía hoy lo preguntan, ¿no es cierto?
Los que viven en el tiempo del fin necesitarán saber la respuesta a esas preguntas. En su vida, Daniel llegó al momento cuando pudo comprender que a pesar de las dificultades que lo rodeaban, Dios estaba con él.
Las Escrituras no presentan una vida cristiana que sea libre de pruebas y sufrimientos, de dolores y aflicciones. Más bien ellas presentan a un Dios que es capaz, un Dios que es suficiente, un Dios que es poderoso para traer fuerzas y ánimo, esperanza y confianza en cualquier situación que los seres humanos tengamos que enfrentar en esta vida.
Esos hombres y mujeres que viven en el tiempo del fin, necesitarán aprender la misma lección que Daniel aprendió, una lección de confianza, de seguridad, de fe. Cualquier tipo de religión que les diga: “Todo lo que usted necesita hacer es darle su vida a Jesús y todas sus pruebas terminarán, todos sus problemas se resolverán, todas sus dificultades se acabarán”, está llevándole a una falsa ilusión. Es como perseguir un espejismo. ¿Han ustedes alguna vez conducido por una carretera en un día bien caluroso, y han visto en frente de su auto como un charco de agua de forma indefinida? Ustedes han querido frenar, pero se dicen: “Espérate un momento, que todavía no he llegado”. Conduce un poquito más hacia adelante y todavía no llega. Algunas personas pasan la vida sin llegar ahí, siempre deseando tener esa vida cristiana en la cual nunca haya una prueba, nunca haya un dolor o una pena.

¡Beneficios Fuera de este Mundo!.-

Hay una etiqueta de parachoques que dice: “Los beneficios de la vida cristiana están fuera de este mundo”. Tan a menudo estamos buscando los beneficios en este mundo, pero los beneficios que Cristo ofrece no son de este mundo.
Ahora, ¿es verdad que hay beneficios aquí y ahora? Si, los hay. Es cierto que Jesús dijo, “Mi paz os dejo, mi paz os doy”. ¿No da Jesús paz? Si. No obstante, Jesús claramente dijo: “En el mundo tendréis aflicciones”. Así que, hay aflicción en el mundo, pero la paz y el gozo están adentro. El gozo de la vida cristiana no nos libra de dificultades, en la vida cristiana hay paz y gozo en el medio y a través de los conflictos. La paz que nosotros tenemos es a través de la fe en un Dios que puede guiarnos y gobernar nuestras vidas ahora, y la paz que tenemos es porque nosotros sabemos que seremos librados de todo conflicto en el nuevo mundo.

El Plan de Nabucodonosor.-

Continuemos con Daniel, capítulo 1. Yo les daré tiempo para preguntas y respuestas, particularmente al final de la clase, pero si ustedes tienen algún comentario, quiciera que se sientan libres de levantar la mano.
Después de unos 1.600 Km de viaje, trajeron a Daniel, ante el rey, al palacio más grande de este mundo. Daniel 1:3-5:

“Y dijo el rey a Aspenaz, príncipe de sus eunucos, que trajese de los hijos de Israel, del linaje real de los príncipes, muchachos en quienes no hubiese tacha alguna y de buen parecer, y enseñados en toda sabiduría, y sabios en ciencia, y de buen entendimiento, e idóneos para estar en el palacio del rey; y que les enseñase las letras y la lengua de los Caldeos. Y señalóles el rey ración para cada día de la ración de la comida del rey y del vino de su beber: que los criase tres años, para que al fin de ellos estuviesen delante del rey”.

Babilonia tenía una práctica interesante. Cuando el imperio Babilónico derrotaba a otra nación, ellos escogían algunos de los jóvenes claves y más radiantes de esa nación y los traían a babilonia para educarlos en la Universidad de Babilonia. Los educaban en las costumbres, prácticas y principios de Babilonia. Cuando estos jóvenes eran educados en la lógica, la ciencia, la religión y la filosofía de Babilonia, eran enviados de regreso a la nación o ciudad de donde ellos eran, para allí gobernar en nombre de Babilonia. Por ejemplo, Nabucodonosor era demasiado sabio como para poner a un babilonio a gobernar en Jerusalén en su reinado, porque habrían revoluciones contínuas contra esos gobernadores babilónicos. Si él podía tomar algunos jóvenes claves que fueranm respetados y admirados por los ciudadanos de Jerusalén y lavarles el cerebro, llenando sus mentes con los principios y prácticas de babilonia, entonces ellos serían los gobernadores en las ciudades de donde provenían.
Esto era lo que nabucodonosor estaba procurando hacer con Daniel y sus amigos. Para hacer eso, era necesario comenzar la obra de cambiar sus formas de pensar y destruir completamente el pasado. Ver Daniel 1:6-7:

“Y fueron entre ellos, de los hijos de Judá, Daniel, Ananías, Misael y Asarías; a los cuales el príncipe de los eunucos puso nombres: y puso a Daniel, Beltsasar; y a Ananías, Sadrach; y a Misael, Mesach; y a Asarías, Abed-Nego”.

“Entre ellos”, esto es, entre los cautivos, habían cuatro jóvenes. Ustedes se preguntarán cómo sé que ellos eran jóvenes. La Biblia en esta ocasión no nos da sus edades. Probablemente eran adolescentes. Ahora, alguien puede decir: “¿Cómo usted sabe eso con seguridad?” Lo sabemos por dos razones básicas. En primer lugar, de aquí en adelante, la Biblia revela que daniel sirvió aproximadamente 70 años bajo el reinado, de por lo menos, cuatro reyes diferentes. Por lo tanto no podía ser un adulto cuando fue tomado cautivo. En segundo lugar la Biblia los describe como jóvenes, “muchachos en quienes no había tacha”, pero dice que eran bien parecidos, enseñados en toda sabiduría, sabios en ciencia y de buen entendimiento. El curso para los caldeos en la universidad de Babilonia era un curso universitario. Así que evidentemente ellos estaban en la última etapa de la dolescencia. Yo veo a Daniel como un graduado del instituto de segunda enseñanza, listo para entrar en la universidad de Babilonia.

Más que un Nombre.-

La intención de Nabucodonosor era llenar las mentes de estos jóvenes con los principios, filosofías y lógica de Babilonia, de manera que todo pensamiento acerca de Dios fuera borrado. Para lograr esto, comenzó cambiándoles sus nombres. ¿Por qué les cambió sus nombres? ¿Cuál es el significado de cambiarles el nombre? Versículo 7:

“A los cuales el príncipe de los eunucos puso nombres; y puso a Daniel, Beltsasar; y a Ananías, Sadrach; y a Misael, Mesach; y a Azarías, Abed-Nego”.

En la Biblia el nombre representa el carácter. Ustedes se acuerdan de Jacob. Jacob engañó a su hermano Esaú con el propósito de obtener la primogenitura. El nombre de Jacob significa “suplantador”, “engañador”. El nombre de Jacob fue cambiado a “Israel”, lo cual significa “uno quien ha peleado con Dios y ha prevalecido”. Jacob cambió, tuvo un cambio en su carácter y el cambio de carácter fue marcado con un cambio de nombre. Abram iba a ser el padre de muchas naciones y se le cambió su nombre a “Abraham”. Cuando Saulo se convirtió, su nombre se le cambió a “Pablo”. Un cambio de nombre indica un cambio de carácter. El nombre de Daniel fue cambiado porque el rey quería un cambio en su carácter. El quería cambiar todas las perspectivas de su vida y le cambió el nombre de Daniel por Beltsasar.
Quisiera que ahora tomen su folleto de estudio y llenen las comparaciones en la página 11. Busquen la sección titulada “Nombre hebreo, nombre babilónico”.
En hebreo el nombre de Daniel significa “Dios es mi juez”. De manera que, mientras Daniel vivía en Babilonia, y sus amigos lo llamaban Daniel, él se acordaba constantemente del hecho de que “Dios mira sobre mi”. Su propio nombre inidacab que Dios era su juez. Pero cambiaron su nombre por Beltsasar. ¿Saben ustedes lo que quiere decir el nombre Beltsasar? “El que guarda los tesoros escondidos de Bel”. Daniel fue introducido al salón de banquetes del rey Nabucodonosor y cuando llegó al salón, la mesa estaba puesta con todo tipo de exquisiteses y alimentos inmundos babilónicos. La luz tenue de los candeleros danzaba sobre las mesas doradas. Nabucodonosor se dirigió a Daniel diciéndole: “Tu nombre será Beltsasar. ¡El guarda de los tesoros ocultos de Bel! Tu ciudad ha sido destruída; tu pueblo ha muerto, los vasos de la casa de tu Dios fueron sacados y traídos a la casa de mi dios, Bel Marduk. Daniel, ahora tu serás exaltado en tu temprana edad, a una posición prominente. No serás más Daniel, sino que ahora tu serás el custodio, el guarda de los tesoros escondidos de Bel”.
Pensemos en la tremenda tentación que esto tiene que haber sido para Daniel, una tentación fantástica. Pensemos en la presión que Nabucodonosor puso sobre la mente de Daniel. “Tu ciudad está destruída, Daniel, y tu pueblo en cautividad. Ni aún los vasos consagrados al servicio del Señor están allí; están en mi templo. Tu serás el custodio de esos tesoros. Tu no serás más Daniel, adorador del verdadero Dios, sino que serás el guarda de los tesoros escondidos de Bel”.
Veamos algunos de los otros nombres y observemos como los cambiaron. Ananías, “el Señor tiene misericordia de ti”. El Señor tiene misericordia de ti, Ananías, aun en la cautividad, en la esclavitud, en el dolor, en la pena. Le cambiaron el nombre por Sadrach, el cual significa: “inspiración del sol”. Escucha, tus bendiciones, tus placeres provienen del sol.
El siguiente, Misael, que significa “como Dios”. Le cambiaron el nombre por Mesach, “el que pertenece a la diosa de Venus”. Misael, “como Dios”, uno que tiene cualidades como Dios, a Mesach, “el que pertenece a la diosa Venus”.
Asarías, “el Señor es mi ayudador”. Eso es lo que significa Asarías, en cautividad, en esclavitud, en peligro, lejos de mi familia, lejos de mi hogar, el Señor es mi ayudador. Le cambiaron el nombre por Abed-Nego, “siervo de Nebo”.

Un Asunto de Elección.-

Vengan conmigo esta noche al salón de banquetes de babilonia. Imagínese que usted está allí. Imagínese que usted está viviendo 2.500 años atrás; imagínese que usted está allí de pie. Lejos del hogar, a unos 1.600 Km de su casa. Usted ha visto su ciudad derrotada, usted vio como corrió la sangre por las calles. Usted está en el salón de banquetes de Babilonia, la ciudad más grandiosa del mundo entero. Usted está deslumbrado. Nunca antes había visto algo como esto. Nabucodonosor está en su trono. Todo tipo de exquisiteses babilónicas están en la mesa; el vino está ahí. Los alimentos inmundos están ahí también. Todo para deleitar la vista y deslumbrar los sentidos y tentar el apetito. Estos alimentos fueron o frecidos a ídolos. Y después de habérseles ofrecido a ídolos los trajeron y los pusieron en su mesa. Para usted el comer esa comida con Daniel significaría que usted se está inclinando en adoración y alabanza al ídolo al cual esa comida fuese ofrecida. ¿Qué haría usted?
Daniel escogió no comer los alimentos, y él tomó esa decisión por dos raznoes. Número uno, había sido ofrecida a los ídolos, y el comerla hubiera sido como participar en el servicio de adoración de los idólatras. Número dos, Daniel escogió no comer alimentos que afectarían las células de su cerebro y nublarían su mente y su juicio. El escogió no comer los alimentos inmundos que estaban en la mesa delante de él porque sabía que no eran lo mejor para su salud. De manera que la Biblia dice, en Daniel 1:8, lo que es el punto céntrico, el texto clave, el versículo más significativo del primer capítulo del libro de Daniel:

“Y Daniel propuso en su corazón de no contaminarse en la ración de la comida del rey, ni en el vino de su beber: pidió por tanto al príncipe de los eunucos de no contaminarse”.

La Biblia dice, Daniel propuso en su corazón. ¿Cuál sería otra palabra para propuso? ¿Qué hizo Daniel? El decidió. ¿Cuál otra? Daniel escogió. ¡Eso es! Daniel se propuso, Daniel decidió, Daniel escogió. ¿Qué más? Daniel determinó. ¡Eso es! Daniel se propuso, Daniel decidió, Daniel escogió, Daniel determinó, Daniel tomó la resolución.
¿Dónde toma lugar el decidir, el escoger, el proponerse? Sí, dice aquí “en el corazón”, lo que quiere decir es la mente. ¿Qué es lo que eleva a los seres humanos por encima del reino animal? Su inteligencia; correcto.
Pudiéramos decirlo de esta forma. Hay animales que tienen una medida de inteligencia pero no tienen una conciencia. Por ejemplo, aquí tengo un pequeño perro que llamaremos Roldán, y Titán vive al lado de Roldán. Roldán está correteando afuera y ve un hueso en el patio de al lado. Creen ustedes que Roldán dice, “yo quisiera comerme ese hueso pero yo sé que sería una violación de la ley de Dios, porque uno de los mandamientos dice, “no robarás”. Así que yo no creo que voy a tomar ese hueso que está en el patio de mi vecino porque sería una violación de los principios del Dios eterno de los cielos y moralmente yo podría tener una conciencia culpable”. ¿Es esa la forma como razonaría Roldán? ¡No! Si por alguna razón él no va y toma el hueso, es porque él piensa que Titán es más grande que él y que lo puede atacar y morder. La única razón por la cual él no va, es por temor a las consecuencias, no porque él pueda tomar decisiones morales finas. Los seres humanos están por encima delreino animal por su fina habilidad de discriminar entre el mal y el bien y basado en esto toma decisiones morales. ¿Correcto?

Etica por Encima de la Situación.-

Ahora, aquí Daniel se propuso en su corazón. Daniel tomó la resolución en su mente. Daniel determinó en lo recóndito de su conciencia. Daniel tuvo una persepción clara de lo correcto y de lo incorrecto. Daniel no permitió que la situación determinara su conducta. Hay una escuela filosófica popular llamada “ética situacional”. ¿Ha alguno de ustedes escuchado esto antes? Hay libros escritos sobre esto. ¿Saben ustedes lo que enseña la ética situacional? Si Daniel hubiera creído en la ética situacional el hubiera dicho: “Puedo ofender al rey, hace varias semanas que no como una buena comida. Solamente es un vaso de vino, es solamente algo pequeño, yo creo que lo voy a hacer”. La persona que cree en la ética situacional dice que no hay una regla absoluta de lo bueno y lo malo. Sino que, el individuo determina en su mente lo que sea más “amable” hacer en cada situación. El deja que la situación determine su conducta.
Por ejemplo, la persona que cree en la ética situacional puede decir algo como esto: “Si tu eres pobre y no tienes mucho dinero, y hau un comerciante rico que tiene una tienda de alimentos en tu cuadra, y tu puedes llevarte un saco de papas de su tienda; estás justificado, porque él es rico y tu eres pobre”. Una persona que cree en la ética situacional puede decir que si dos jóvenes se aman, no existe tal cosa como adulterio. El diría que la experiencia amorosa guiaría su conducta. La persona que cree en la ética situacional diría que si el gobierno no está usando el dinero de los impuestos en una forma correcta y usted puede engañarlo en su declaración anual, reteniendo $500 sin ser descubierto, usted puede hacerlo.
Pero esta noche yo quiero mostrarles que Daniel no era uno de los que creía en la ética situacional. Daniel tenía en su mente una clara distinción entre lo que era el bien y el mal. No era que, siendo que él estaba en Babilonia podía ceder a sus principios. Daniel se propuso en su corazón servir a Dios no importa donde él estuviera. Daniel determinó eso; Daniel se propuso eso en su corazón. Ustedes saben, es facil flotar en la corriente, pero es dificil nadar en contra de ella.

Permanecer de Pie y ser Contado.-

Daniel estuvo dispuesto a nadar en contra de la corriente. Daniel estuvo dispuesto a permanecer de pie y ser contado; Daniel estuvo dispuesto a ser diferente. ¿Cómo es tu vida, amigo? En tu trabajo, cuando alguien dice un chiste subido de tono y todo el mundo se ríe, y tu sabes que es un chiste inmoral, ¿te ríes tu, nada más que para que los demás no piensen que eres diferente? ¿Para ser aceptado por los demás que te rodean? Si tu decides no beber en una situación social donde todo el mundo está bebeindo. Dirías tu, “bueno, realmente yo no quiero ofender a nadie, así que creo que yo también lo voy a hacer?” ¿Qué haría usted en esa situación? ¿Es usted como Daniel? Los que vivan en el tiempo del fin y sean leales y fieles a Dios tendrán que soportar presiones; las presiones del conformismo. Ellos estarán dispuestos a permanecer firmes de parte de lo correcto porque es correcto. Esa es la lección básica que estamos aprendiendo esta noche en Daniel, capítulo uno, disposición para permanecer firmes solos, tener el valor de ser diferentes, el valor de ponernos de parte de lo correcto porque es correcto, no ser formado, moldeado o manipulado por las circunstancias que nos rodean.
Uno de mis pensamientos favoritos sobre este punto proviene de un autor cuyos escritos me gustan mucho. Me habló al corazón cuando lo leí; a ver si a ustedes les gusta también:

“La mayor necesidad del mundo es la de hombres” (pudiéramos decir hombres o mujeres) “Hombres que no se vendan ni se compren”.

Hay mucho de esto hoy en día, ¿no es cierto? Compra y venta de hombres. Los políticos se compran y se venden. Los hombres de negocios se compran y se venden.

“La mayor necesidad del mundo es la de hombres. Hombres que no se vendan ni se compren. Hombres que en lo más íntimo de sus almas sean veraces y honestos. Hombres que no teman llamar al pecado por su nombre. Hombres que sus conciencias sean tan fieles al deber como la brújula al polo. Hombres que se mantengan de parte de la justicia aunque los cielos se desplomen”.
Hombres raros en nuestra sociedad, ¿no es cierto? Hombres que sean honestos en los negocios. Jóvenes que sean honestos en la escuela, que aunque tengan la oportunidad de hacer trampa no la hagan por causa de su integridad. Hombres y mujeres que sean honestos al pagar sus impuestos. Hombres y mujeres que sean honestos al tratar con sus vecinos, cuando ellos dicen algo, ellos lo hacen. ¿Habrán algunos Danieles en nuestro alrededor hou en día? ¿Habrán todavía algunos hombres y mujeres en nuestros días que tengan un carácter realmente moral?
Un hombre que es el presidente de una gran compañía en Massachusetts, una compañía de 700 empleados, vino a nuestros seminarios y su vida ha cambiado completamente. El era un buen hombre, pero ahora que él ha aceptado los principios de la Biblia y que es un cristiano, su vida es completamente diferente. Aun se ve en ocasiones sociales en las cuales él antes bebía, pero ahora tomó la decisión de que no lo hará más. Cierto día él se encontraba con un grupo de ejecutivos, incluyendo el vice-presidente de una de las más grandes compañías en los Estados Unidos, la compañía de la cual la suya era subsidiaria. El primer hombre ordenó un coctel, el segundo un whisky y así todos ordenaron sus bebidas. Le llegó el turno a este ejecutivo que había tomado esta decisión en su mente y en su corazón. Así como Daniel se propuso en su corazón que no se contaminaría con la comida del rey, con sus carnes ni con sus vinos, así este hombre se sintió compelido a mantenerse firme en su decisión en cuanto a la bebida y su participación en la misma. De manera que cuando le llegó su turno, dijo, “un jugo de tomate, por favor”.
La camarera trajo las bebidas, champa´n para este, whisky para el otro, y el ejecutivo tomó su jugo de tomate. Uno de los vice-presidentes ejecutivos lo miró, y llamó por su nombre a otro y le dijo, “lo próximo que escucharán es a fulano repitiendo su Biblia”. Y él se dijo a si mismo, “si tan siquiera él supiera”. Él no se intimidó, él no se dijo, “bueno, siendo que todo el mundo lo hace, yo también lo voy a hacer”. Él no lo hizo, él había llegado a una conclusión, a una decisión en su vida.

Todos estamos Envueltos.-

Antes que pasemos por el tiempo del fin, amigos, el mundo tendrá que enfrentar lo que la Biblia llama “la marca de la bestia”. Cada hombre, cada mujer, cada niño que quiera servir a Dios tendrá que soportar una presión tremenda.
¿Te has propuesto en tu corazón hoy, que lo único que te importará será no lo que los hombres piensen de ti, sino lo que Dios piense?
¿Que tu no serás un títere de los demás, sino que tu conducta estará regida por los principios ue tienen su centro en Dios y que tu primer y mayor interés es y será agradar a Dios?
Daniel tomó esa decisión y milagrosamente Dios lo bendijo. Daniel en diez días de prueba. Le dieron los diez días de prueba y Daniel dijo, “miren, dénme primeramente la sencilla dieta judía”. El pidió una dieta de frutas, nueces, granos y vegetales. El capítulo uno de Daniel comienza con un fracaso para el verdadero Dios. El capítulo uno de Daniel termina con un triunfo para el verdadero Dios. Daniel fue llenado de conocimiento, sabiduría y ciencia, más que todos los del imperio babilónico. El capítulo uno de Daniel termina de esta forma. Veamos los versos 17-20:

“Y a estos cuatro muchachos dióles Dios conocimiento e inteligencia en todas letras y ciencia; mas daniel tuvo entendimiento en toda visión y sueños. Pasados pues los días al fin de los cuales había dicho el rey que los trajesen, el príncipe de los eunucos los trajo delante de Nabucodonosor. Y el rey habló con ellos, y no fue hallado entre todos ellos otro como Daniel, Ananías, Misael, y Azarías; y así estuvieron delante del rey. Y en todo negocio de sabiduría e inteligencia que el rey les demandó, hallólos diez veces mejores que todos los magos y astrólogos que había en todo su reino”.

Si Daniel no hubiera tomado la decisión de ser fiel a Dios en el capítulo uno, Dios no hubiera podido usarlo tan milagrosamente en el capítulo dos.
Todo nuestro servicio a Dios está basado en nuestra fidelidad a El. Antes de Dios hacer algo con nosotros, El hace algo por nosotros. Dwight L. Moody dice: “Todavía el mundo ha de ver lo que Dios puede hacer por, y con, y a través, y en, y por medio de, el hombre (o la mujer) que se consagre totalmente a El. Por la gracia de Dios yo seré ese hombre”.

¿Determinarás en tu corazón ser ese hombre, o esa mujer?
¿Por qué no hacerlo hoy?